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Sutil, y no tan sutil, repaso por algunos pasajes de la vida cotidiana.

viernes, 16 de septiembre de 2011

Furor por la higiene

Hace muchos, muchísimos años, más de los que puedo recordar, usaba para mi higiene "sobaquil" desodorante de la marca "Byly" en crema. Yo no sé la fórmula que usará hoy día su fabricante, pero en mi adolescencia, me sacaba por la axila unos golondrinos como garbanzos ¡qué asco! y sobre todo, ¡qué vergüenza!

Yo era poco menos que aadicta al desodorante en crema "Bily" lo que me dió no pocos disgustos, bueno, no a mí sola porque a alguno más de nosotros, también le dio por saco con granos poco atractivos en las más insospechadas zonas corporales, de modo que, en casa se dejó de comprar.

En aquellos felices días en los que las marcas blancas, no habían hecho su aparición todavía, llegó a nuestras estanterías el desodorante en roll-on "Mum" y fue para mí, un hallazgo y el fin de mis problemas sudoríparos y de paso, podía cerrar los brazos gracias a que ya no me salieron más granos bajo ellos.

Han pasado ya algunas decenas de años. Hoy, que soy una mujer hecha y derecha (creo), en una época en la que "Carrefour" y demás galerías, han sacado todo tipo de sustitutos, desde su segunda división, o sea, la tan temida Línea Blanca, yo, vivo atemorizada con la idea que "Mum" desaparezca poco a poco del mercado. La cadena de supermercados "Mercadona" ya lo ha retirado de la venta, así como algún que otro establecimiento, de modo que, donde lo encuentro ¡zas! al carro y bueno, tengo en casa unos cuantos. Rubén dice haber contado diez o doce pero él és un exagerado, en realidad, no guardo más de cuatro o así, más el mío y el suyo, el "for men" que van rulando por nuestros cuartos de baño.

Hoy he ido a la droguería a hacer compra de cosas de limpieza y lo he visto ahí, desafiante, diciéndome "cógeme y llévame a casa que te van a faltar de lo tuyo" He acercado mi mano a una unidad de tan preciado producto, casi temblaba mi pulso pero no, lo he dejado allí y he podido yo sola pensar que igual mañana, aún seguirá ahí... sí, creo que mañana, sin falta, me escaparé de casa para traerme otro par de botes de mi desodorante favorito, no sea que se deje de fabricar y me la jueguen.

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