Cuando llegan estas fechas tan entrañables (y no trato de emular al Rey, aunque lo parezca) a muchos se les ocurre, la brillantez de llamar a una entrada "Navidad" y ¿Qué es la Navidad?
La Navidad, és en resumen, Centro Comerciales y tiendas abarrotadas de personas comprando regalos para la familia, compromisos y demás... la Navidad és, Grandes Superficies, con esttanterías llenas de miles y miles de calorías... La Navidad, és, olvidarnos del hambre del mundo, aunque nos acordamos más que nunca, porque nos volvemos mega buenísimos, pero llenamos nuestros carros de lo mejor que cada uno a su bolsillo puede adaptar... En resumen, la Navidad es, quedarte en enero más pobre que las ratas (si llegas vivo a enero, claro) y con una talla con alguna X de más.
Piensas "Me he hinchado estas navidades" y pretendes perder los kilos de sobra. Año Nuevo, Vida Nueva y "Me apunto a un gimnasio al que no vuelvo jamás" Esto me recuerda, que tengo que retomar mis entrenamientos, pero esto es otra historia.
A nadie nos gusta la Navidad, es un horror. Algunos hemos dicho en alguna ocasión "Me gustaría dormirme el día 22 de diciembre (si no te ha tocado la Lotería, claro) y amanecer el 7 de enero... "Pongo el árbol por los niños" (que están a punto de cumplir los 20 años o más) y por estos mismos "niños" hacemos una cena del copón, tras la que podrías morir de un síncope, que por cierto, a los tales nenes, maldita sea la gracia que les hace cenar con papá y mamá pero es que es tradición.
En mi caso, aún deseando más que nada en el mundo, no celebrar la Navidad, me cagué en toda la hostia, cuando mi hermano, compró billetes para irse a Alemania a celebrar la Navidad con "toda la familia" Bueno, a mí y a mi hijo pequeño, no nos compró billetes pero claro, él no sabía si yo tenía vacaciones o trabajaba y en suma, me vi en Nochebuena con Pablo durmiendo (mi hijo) y yo, llorando de soledad y de asco.
Mirando todo esto, sigo pensando que la Navidad me importa una soberana mierda, sin embargo, este año, he puesto árbol, si, he caído, mea culpa. Fuimos Rubén y yo al "Carrefour" y nos llevamos un árbol blanco al que adornamos con un juego de luces precioso de fibra óptica y unas bolas más magníficas todavía procedente de "Imaginarium" tienda de la que hay que echarle de comer aparte, ejem....
Como no, también he puesto "El Belén" en muchos sitios de España, llamado "Nacimiento" y, estando en Cataluña, es pecado que no tenga un "caganet" tengo que buscarlo.
Fiel a las tradiciones, en lo que no he caído, ha sido (todavía) en adornar la casa de guirnaldas como se hacía en casa de mis progenitores. Hoy, no sé si se hará, pero como hay niños (los nietísimos, hijos de mi hermano Pablo) supongo que hay pretexto para emperifollar (más) el palacete de La Alameda.
Mirando todo esto, hago un examen de conciencia (¿?) y me digo a mí misma que por qué hago estas cosas, bien, lo diré en voz alta: PORQUE ME DA LA REALÍSIMA GANA.
Navidad, significa, para los cristianos, Buena Nueva y, si, tengo motivos más que de sobra para celebrar las Buenas Nuevas que me traen la vida que son mi pareja, Rubén, el ser que adoro y me adora, mis perros, mi gata... Si, tengo motivos para cagarme en la madre que parió a Paneque, como mi hijo el mayor, que, desde que decidió "vivir su vida" no hace más que dar tumbos pensando que vive "de puta madre"... Luego lo de Pablo, allá en La Línea... claro, claro, motivos para alicatar dos cuartos de baño, tengo para lamentarme pero también tengo los primeros, los de celebrar y digo yo, ¿qué culpa tienen mis seres queridos de mis males cuando no hacen más que estar a mi lado en lo bueno y en lo malo (momentos estos abundantes, desgraciadamente)?
Si, voy a celebrar el nacimiento del Señor porque soy Cristiana y agradecida, porque quiero dar gracias a Dios por ser tan generoso conmigo, por ayudarme a rodearme de cosas buenas, por tener mi casa tan bonita y esa lavadora que me acabo de comprar y centrifuga como el culo... Sí, quiero que estas Navidades sean especiales, aunque por el motivo que sea, no hagamos banquete (o sí), aunque me coma unos huevos rellenos (¡qué ricos!) pero estos días, celebraremos, que, un año más, estamos juntos, que nos amamos y a nuestro alrededor, se han ido incorporando seres que nos miman y a los que mimar.
El resto, si no quiere apuntarse a la fiesta, peor para ellos, nosotros "palante" a lo nuestro. El que quiera, está invitado a la celebración si viene de buena fe y si no es así, por favor, no os acordéis de nosotros, gracias.
Feliz Buena Nueva y Feliz Vida.
Sí, aquí se echa de menos un árbol de Navidad, de hecho, estaba previsto subir junto al título de la entrada, la foto del mío propio: un árbol blanco que nos ha quedado la mar de chulo... pero se ve que al fotógrafo aún le ha dado la desidia... qué se le va a hacer.
ResponderEliminarOtro día será.